Sobre su obra

Abracadabra

De la presentación del libro,
Por Roberto Ferro

Abracadabra.
La ceremonia se inicia.
El oficiante interrumpe la distancia silente.
Busco
en la apretada vocación de los signos que se juntan en racimos dispersos
busco
arañando con las pupilas las vacilantes columnas de hollín.
Abracadabra.
El rito trae la voluntad de fecundar el nacimiento
siempre nuevo
para alcanzar los símbolos
los misterios
para encontrar un índice
uno solo
o
quizás
apenas para volver con los ojos iluminados
a urgar en la memoria de las líneas
y
leo
“COMO SI LA INMORTALIDAD
FUERA UNA PALABRA
Y
EXISTIERA
CIERRO LOS OJOS SOBRE MI TRAZO
ABIERTO PARA ATRAPAR
LA LÚCIDA PENUMBRA QUE DESPRENDE”
Abracadabra
rebota en los ecos de la hoja
en mi mirada inquieta de iniciado
en el suspenso que atraviesa
la permanencia rota del poema.
Así simplemente aceptando su mandato
leo
Abracadabra
no buscando el resorte que devele
en la mirada
la pirueta inquieta de su voz
y
de la mía.
Y
el paisaje mismo
y
las sombras mismas
y
los mismos ausentes
enlutados
se asomaron en los bordes abiertos de las líneas.
Yo buscaba
ya iniciado
buscaba
y
la palabra
la palabra
fue
es
la palabra
ese puñado de insolentes fragmentos dispersos
que eligieron
junto a una voz
horadar el plano
para repetir el eco.
ese puñado que atraviesa la piel primera de la hoja
abriéndole ojales
ojales por los que se cuelan
las miradas duplicadas de extraños visionarios que curiosos revisan
la vida más allá de la apariencia.
Palabras
como ojales
despiadados en la carne voraz de la lectura
asomando en avalancha
los recuerdos
o
las ilusiones
las alabanzas
o
las sirenas brutales que extinguieron
la permanencia
en aquella tarde
esta
en que Liliana repetía
repite
“TODO LO DEMAS
SON CUENTOS DE HADAS
JARDINES DE INVIERNO
PÁJAROS EMBALSAMADOS POR EL MIEDO”.
Abracadabra y sus ojales
como bandada de gorriones despanzurrados de sueños
“COMO PALABRAS DESNUDAS CON LOS BRAZOS EN ALTO”
y no
solo en alto
respondiendo a una amenaza
también en alto como un llamado
a pesar
de que existe en el bolsillo interior de nuestro saco cotidiano
“UN CALENDARIO DEL MIEDO”
PALABRAS CON LOS BRAZOS EN ALTO
“PORQUE ES MEJOR VIVIR DE PIE QUE MORIR ASESINADO DE RODILLAS
QUE CREE USTED SEÑOR?
preguntan de frente las mil
voces del silencio en su voz y su poema
Recuerdo en sus palabras
o
sus ojales
los muros
arrasados por la mordaza de cal
que borró las huellas unánimes
recuerdo
como fuimos aprendiendo
que el significado de las palabras
o
los ojales
es el uso
y el uso de la muerte
se enterró en sus palabras
como ojales
desgarrados
y
violentos
para que el rito no oculte al revelarnos otro ciclo
las sombras laterales del espanto y de la soledad con todos

“UNA DISTINTA MUERTE
DE PIEDRA Y MUSGO TU SILENCIO”

“UNA MUERTE DIFERENTE
OTRA MUERTE
SI TE HUBIESES MUERTO”
porque el espanto se reparte también en los limites obsesivos de un nombre
blanco
un nombre otro
que suele asomar su cabellera en los ojales.
Y ese tenaz asedio de la muerte permite descubrir el vuelo concreto de la voz
poética que avanza desde todos los rincones del sentido y queda instalada en el vaivén de la mirada,
Abracadabra es un libro de poemas
no solamente por una nomenclatura establecida
ni tampoco por el capricho de sus líneas mordidas
es un libro de poemas porque su gesto en cada palabra no alaba la cárcel del
sentido
sino que provoca la memoria
la mirada
sin recortar el camino inverso de los ojos
otros, siempre nuevos en cada ceremonia.
Quizás hoy
y
aquí mis palabras cerca
mis palabras preferidas en plural tartamudean la
reunión de muchas voces
porque Liliana dice desde
hoy
y
aquí
con la mistonguera nostalgia de la
muchacha aquella
y el arrabal oculto
de la melancolía
y
dice desde
hoy
y
aquí
con su asedio sin fin de la muerte
y
de la vida
UN POEMA ES UN DESASTRE DE AMOR
Nadie que se anime
POR PEQUEÑA
Y
ESCRIBIENTE NOCTURNA que sea
a
SOSTENER LA COPA
puede olvidar
y
los poemas son cicatrices abiertas en el tiempo.
Solo queda ahora con su libro Abracadabra en cada mano recordar a los nuevos oficiantes de su rito
que pueden violar sus garabatos
apoyar su voluntar y su locura en cada línea
arrancar las hojas que molesten
empujar las soledades en los bordes
lo que no podrán es esperar que las palabras
o
los ojales le abracadabren los poemas
la magia es solo posible si uno se anima a leer y a no ser leído.

He preferido elegir solamente
algunas hebras del tejido de los poemas de Liliana
aquellos que me traían rebotando todos los murmullos nuestros
y digo nuestros porque a nadie se le escapa que yo estoy aquí no en tanto que Roberto Ferro sino más bien como uno
aquel
este
todos
sus amigos
así
elegir conceptos
encarcelar los poemas en retóricos esquemas hubiera sido traicionar un poco mi lugar
No quiero olvidar que este libro
estos poemas
estas palabras
cada marca
tiene un recorrido
“PORQUE CADA PALABRA TIENE SU PROPIO NOMBRE”
que cada tipo de plomo fue aplastado a martillazos, que hubo
una vocación definida
que un libro de poemas
“NO ES PRECISAMENTE ESTO:
SENTARSE EN LA OFICINA”
es también la lucha para someter el silencio vertical que
amenaza desde todos los rincones del olvido.
Solo queda entonces
Abracadabra
y
su proyecto.
Abracadabra
y
su permanencia.
Abracadabra y nosotros.